Le costó y mucho a Deportivo Argentino gritar campeón en su cancha y ante su gente. Enfrente tuvo un gran equipo que mereció llevarse algo de Treinta de Agosto, pero por cosas del fútbol la victoria fue para el local que se convirtió en el justo campeón de este Torneo Clausura.
El partido comenzó con una de las situaciones más claras del partido, cuando al minuto de juego Alexis Martínez quedó cara a cara con Reale pero no pudo convertir. El Colono avisaba desde el arranque que no le iba a hacer las cosas fáciles a Deportivo.
En un encuentro muy parejo, las cosas continuaban 0-0 porque Mauricio García y Exequiel Reale tenían una tarde formidable, con intervenciones claves en varias oportunidades para impedir la caída de sus arcos.
Y cuando todo el mundo pensaba que el partido terminaba en empate, Santiago Moyano, que comenzó jugando como lateral izquierdo y finalizó jugando como delantero, encontró una pelota fuera del área que impactó de una manera excelente con su zurda para colgarla en el ángulo y marcar el gol del campeonato. Era esta la única manera en que se le podía convertir un gol a García, que tuvo una tarde casi perfecta.
Tras el gol se desató la alegría en Treinta de Agosto, solo algunos segundos de reanudación del juego y el pitazo final de Sergio Orozco para marcar el final y consagrar al «Depo» como campeón del Clausura.
Una vez más, al igual que en 2017 y 2018, Deportivo Argentino consigue dar una nueva vuelta olímpica, consagración que permite también saber que ya es un hecho que en este 2019 tendremos Liguilla.
¡SALUD CAMPEONES!